




Como quiera que la "tapa de ensamblaje" tendrá que perder fuelle, me da en la nariz que los establecimientos van a retomar la esencia de la tapa en sus orígenes, esto es la tapita de guiso. En pocos sitios que no sean de corte tradicional, se puede pedir, hoy en día, una tapa de cuchara. Se salvan en temporada los garbanzos con bacalao, el atún con tomate y se mantienen todo el año el salmorejo y las papas con choco. De fuera nos llegan la fabada y en cada vez menos sitios sirven el cocido con berza, propio de Jerez, que en Sevilla se hace con acelgas. Diferentes platos, diferentes productos y diferentes formas de entenderlos. Aún así los de cuchareo son una propuesta pujante que ocupará el sitio que le corresponde en las pizarras de todos los bares, como pasó con el tan explotado tataki de atún o las croquetas de rabo de toro. Si no al tiempo…
En imágenes Salmorejo con velo de remolacha de Kisko García, Choco en Córdoba. El tradicional de Los Cuevas en Sevilla. Papas con choco de El Copo en Palmones, guiso de patatas con atún de Casa Rufino en Isla Cristina, Huelva y Alubias con ibérico del libro de recetas galardonado en el Gourmand.