Cuando recibí el último número de la revista Cocina Futuro" y vi la portada, la nº 114, sentí una extraña sensación. Un desasosiego que nunca antes había sentido. José Luis López de Zubiría, el gran maestro de la fotografía gastronómica, había conseguido transmitirme un mensaje con su fotografía. Una profunda sensación de soledad y tristeza…y no lo comprendí.
Cuando leí las primeras páginas entendí el porqué. Mi gran amigo Gaspar Rey, el editor de la publicación, había fallecido. Lo conocí en la segunda edición del Congreso Andalucía Sabor. Necesitaba una maquinilla de afeitar para mantener impecable su marmórea cabeza de mariscal y me pidió que le llevara a un súper para comprarla. A partir de ahí amistad pura y dura. Le fotografié en unas condiciones extremas de luz y retoqué la imagen para mejorarla y se la envié de regalo. A él siempre le gustó porque decía que se veía al Gaspar que el quería que vieran los demás. Vaya! Demasiado para mí. Hago este pequeño homenaje a mi amigo Rey, a quién nunca olvidaré…un tío auténtico. Y me despido como él me decía "adiós sevillano ¡Salud y República!"