KAKURE. EL PLACER DE COMER EN JAPONÉS.

Ya lleva "larga andadura" este restaurante, que abrió hace a penas un año y medio. El principal afán de Fernando y Abel era ofrecer comida japonesa en la que también se incluyeran otros platos además de los populares sushis y sashimis. Y digo esto porque, de la misma manera que la paella representa a España como plato más conocido, en Japón un restaurante de comida española debería ofrecer también cocido, salmorejo, rabo de toro, fabada…etc. y no sólo el plato levantino (a pesar de que es lo más usual). La cocina japonesa no es sólo pescado crudo con arroz, como muchos la identifican con algo de sorna, sino que atesora recetas desconocidas que Kakure de la mano de su cocinero japonés Kosker, pone al alcance del paladar de sus clientes.
Sus sopas son nutritivas y revitalizantes. El tonkatsu, rebozado de cerdo, en la culinaria oriental, rememora los empanados españoles y portugueses, de la época jesuita. El okonomiyaki es una deliciosa tortilla de vegetales acompañada de virutas de atún seco que combinan a la perfección con una suave salsa parecida a la mahonesa y es uno de los best sellers de la carta. En fin mucho por descubrir todavía. Una visita a Kakure, en la calle Marqués de Paradas, es una grata experiencia de esas que te hace contar a tus amigos. Los precios son, más que equilibrados, una alegría para el visitante y el trato del personal agradable y dispuesto.
Disponen de un menú a mediodía muy completo y servicio "Take Away" llamar y recoger, ideal para cuchipandas entre amigos o cenas o almuerzos en casa o en la oficina.
Tengo una visita pendiente que creo que voy a cumplir en breve, hasta entonces disfruto con las fotografías.

1.- Detalle de sala - 2.- Dumplings - 3.- Tempura variada - 4.- Tartar de atún - 5.- Okonomiyaki