El sugestivo nombre que nos ocupa en este post fue invención de José Luis y Trini, matrimonio que regenta este fantástico sitio ubicado en la Buhaira. No hace mucho hablaba con el Perro Gourmet sobre la rutinaria y, a veces, insulsa evolución de la tapa sevillana en el panorama general. Evidentemente acuciados por lo que se estila, los nuevos profesionales se apuntan a una corriente que marca directrices aptas para todos los públicos, sin tener en cuenta que se suman a lo cotidiano con propuestas del montón, a menos que se tenga toque, chispa, garra y duende para convencer al que los visita.
Sevilla se ha inundado de tatakis, miniburguers, burritos, flautitas, y más diminutivos de cocina foránea que han saltado de barra en barra a tenor del éxito que ciertos establecimientos conseguían con sus originalidades. Comentábamos entonces que cuando alguien de fuera visita la ciudad, no busca lo que ya tiene sino lo autóctono. Lo auténtico de aquí. La tapa sevillana ha caído en desuso menos en algunos templos de barrio en los que incluso aún se cantan de viva voz. Las espinacas con garbanzos, el menudo, las pavías, el caballito de jamón…todos compusieron un ejército de deliciosos bocados que provocaban la afluencia de público buscando la excelencia que un mismo plato en otro lugar no ofrecía. Eso era tapear, buscar el singular, no el montón. Ir al tardón a disfrutar del pincho moruno. Al Postigo la pringá. A Triana la punta de solomillo y a Los Remedios los caracoles…
Pues bien Cuarto de Siglo está en la onda de los bares de tapas sevillanas sin más intención que ofrecer lo nuestro y con intachable calidad. Materia prima seleccionada y punto perfecto de elaboración, Ahí Trini tiene la sartén bien cogida por el mango y todo pasa por su supervisión. Practica algo así como alta cocina de tapeo tradicional. Sangre encebollada, Pavías, Croquetas de puchero, Carne con tomate, casero a rabiar, Caballito de jamón, sublime y un largo étecé que nos dejará empresionados y muy satisfechos. El lugar es amplio, un bodegón más que bodequita, buena triquiñuela publicitaria y dispone de un bodega bien cuidada y una cerveza como gusta en Sevilla. Tapear a la sevillana tiene un nuevo recinto. Cuarto de Siglo en calle Diego Angulo Íñiguez, en la Buhaira. Una última recomendación acercarse en metro o paseando. Tipi, Tapa, Tipi, tapa…
Thanks!! Vanessa. Now i´m your follower too…Kisses from Seville.
ResponderEliminarLa verdad es ke como restaurante y como pagador tiene mucho que desear
ResponderEliminarBueeeno!
ResponderEliminarEmpiezo mi respuesta para el público en general valorando el cariz del tono de nuestro anónimo.
Como comprenderéis, no soy partidario de publicar estos trapos de los demás. Pero en este caso lo voy a hacer porque estoy un poco cansado del término "anónimo" y como tal voy a tratar este comentario y a su desconocido autor. No te voy a dar credibilidad, "mr. anónimo" porque no se si eres la mala competencia, el proveedor despechado o el trabajador no renovado, como todos alguna vez, postergado a la espera que resulta interminable y que desespera…no se qué te avala, y como tal no te voy a dar ninguna credibilidad!! para que te aclares.
Si pones tu nombre. Si hubieras firmado tus palabras con valentía la hubieras respetado y ensalzado como comentario fidedigno. Yo les hubiera dado su sitio por derecho, pero como no es así, en ése anonimato que te precede de poco valor, te respondo abiertamente: Como restaurante es un sitio sincero y lo que pone de comer es bueno y de calidad, por eso está en mi blog. Y yo lo he probado. Y no soy un comentarista gratuito.
A mi me parece un lugar muy recomendable y que sin duda ganará adeptos, siempre que mantenga la calidad y el afán de trabajo. Y si les tengo que apoyar con mis crónicas lo haré sin duda. Si me defraudaran lo comunicaría , si fuera necesario, pero con más tacto que el que tú has puesto en tus palabras.
Espero que dejes de parapetarte tras el seudónimo "anónimo" y la próxima vez des la cara o un nombre. Sienta mejor. Incluso ayuda a responder sin pensar en que hay otros intereses aparte de los puramente gastronómicos.